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El Estadio Azteca se vestirá de gala el 11 de junio de 2026, fecha que todos deben marcar en el calendario, que es cuando se dará inicio a una nueva Copa del Mundo. Como es sabido por todos, la Tricolor está clasificada de forma automática para la fase de grupos, junto con los otros coanfitriones, Canadá y Estados Unidos, por lo que tiene algo menos de dos años para irse preparando para llegar a la cita en las mejores condiciones posibles. Para ello, la Federación dio las riendas al tándem formado por Javier Aguirre y Rafa Márquez.
Mientras, tanto en Europa como en América Latina, habrá máxima tensión para lograr uno de los 48 boletos. En la situación actual sudamericana, Argentina domina la clasificación, mientras que Brasil se sitúa ligeramente por detrás de los vigentes campeones de 2022. Pero según las cuotas de clasificación que se pueden consultar en las casas de apuestas de México recomendadas por Oddschecker para apostar en fútbol, la Canarinha no debería tener problemas para clasificarse, igual que Uruguay o Colombia.
El plan de Javier Aguirre
Con la clasificación asegurada, aparecieron muchas dudas sobre cómo, el cuerpo técnico de Javier Aguirre, conseguirá motivar a sus jugadores durante ese periodo de aproximadamente dos años. Como el Vasco ha reconocido en rueda de prensa, el foco no lo pondrá en los resultados, algo que en otro contexto sería fundamental; sino que se centrará en ofrecer un buen juego e ir creando un grupo que sea capaz de dar lo mejor en el Mundial de 2026. Aun así, aparecen dos pruebas en el horizonte.
Hasta el mes de noviembre no se disputará un encuentro oficial y éste será bajo el marco de la Liga de las Naciones de la Concacaf 2024-2025, concretamente en los cuartos de final. Por coeficiente, el combinado nacional ya está clasificado y, en caso de pasar la eliminatoria, disputarían en marzo las semifinales y la hipotética final. Así pues, este será el torneo donde se entrene y se pueda ver rendir el equipo del nuevo director técnico en situación de eliminación directa, luchando por un título.
Por otro lado, en los meses de junio y julio de 2025 se vivirá otra Copa de Oro, pero con la particularidad de la participación de otros países a los habituales. México, como vigente campeón, acapara todos los focos y tendrá como invitados a un par de equipos de África, Asia, América Latina y Europa. De este modo, el nivel competitivo crecerá respecto a las ediciones pasadas y será una prueba de fuego para demostrar que está todo listo para la Copa del Mundo 2026, pues se jugará en las mismas sedes.
Candidatos a entrar en la lista
Hasta la fecha, en lo que se refiere a choques de preparación, hay confirmados tres para septiembre: Nueva Zelanda, Canadá y Estados Unidos. A la espera de la primera convocatoria oficial, que puede dar muchas pistas sobre cómo se desarrollará el Mundial, Javier Aguirre ya ha explicado públicamente qué es lo que espera de sus jugadores: quiere gente disciplinada y que, en el momento de la lista, esté en pleno estado de forma; pero, a su vez, abre la puerta a jóvenes promesas y a los más veteranos; negando que la edad sea un impedimento.
Con estas palabras, se espera la presencia de Julián Araujo y Edson Álvarez, ambos en la Premier League y que podrían ser piezas importantes de presente y de futuro para el técnico. También Johan Vásquez, una de las caras que brillan en la Serie A italiana; así como Santiago Giménez, el intratable goleador del Feyenoord de la Eredivisie, que todavía no ha podido demostrar su valía vistiendo la tricolor. Otro nombre que no pasa desapercibido es el de Germán Berterame, recientemente naturalizado como mexicano.
