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Tras las desgarradoras imágenes del niño Emiliano antes de morir, hoy el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), lamentó el asesinato del menor que había recibido al menos tres disparos a quemarropa por sicarios en un intento de secuestro en Paraíso, Tabasco.
Desmintió dicha versión difundida este miércoles, y aseguró que el pequeño, de 12 años, salió de casa y tres hombres a bordo de un auto intentaron secuéstralo, ante los forcejeos, uno de los sujetos armados, le disparó.
«Pero no es lo del secuestro, porque ayer se habló mucho de eso sin ninguna prueba», enfatizó.
El político tabasqueño dijo tratarse de un hecho doloroso, pero reiteró que la difusión que se le dio a la noticia, fue para perjudicar su imagen presidencial en los actuales tiempos electorales.
«Y todo lo que sea para perjudicarme a mí, más que es mi estado, los corruptos están muy enojados, magnifican mucho todo lo relacionado con violencia», apuntó.
