STAFF/Brenda Barajas
Desde el exdiputado local por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), Erik Juárez Blanquet, fue asesinado, varios de sus colaboradores han sido despedidos por el Congreso del Estado.
Se estima que hasta el momento se han dado de baja a 8 empleados, de los cuales 4 aceptaron su liquidación, mientras que otros 4 esperan que se les brinde un pago justo como finiquito.
En entrevista anónima, un pequeño grupo de los afectados explicó que cuando falleció Juárez Blanquet, sufrieron retrasos en sus pagos, sin embargo, la situación empeoró cuando llegó el diputado suplente Ángel Custodio Virrueta García, debido que se les dio de baja a partir del 23 de abril.
No siendo suficiente el despido injustificado, explicaron que autoridades del Legislativo se niegan a pagar lo justo. Les ofrecieron pagar solo la prima vacacional y una parte proporcional del aguinaldo.
“Desde el 23 de abril fuimos dados de baja, entendemos que los diputados traen su compromiso, pero lo único que les pedimos es que se nos pague conforme a la ley, cosa que no ha sido así, ni siquiera nos dan la baja para cobrar en pensiones”, explicó uno de ellos.
Abundaron que una compañera intentó acercarse al nuevo congresista, quien recalcó que no le debía nada al difunto, motivo por el cual hizo caso omiso a los casos.
Así mismo mencionaron que algunos diputados y diputadas se ofrecieron a ayudarlos, pero no pasó nada.
“Pues ahora ya nadie comenta nada sobre el tema… ya nada más están a la espera de que firmemos, y tenemos la idea que muchos diputados son saben lo que está pasando… creemos que nuestra situación no le importa y hemos escuchado que trae una actitud muy prepotente”, abundó.
Por último, explicaron que aún permanecen tres trabajadores de Juárez Blanquet, en el Congreso del Estado, apoyan al nuevo diputado en la comisión de puntos constitucionales.