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“A los niños hay que escucharlos, siempre, con respeto, niñas y niños tienen una gran sabiduría. Tienen sentimientos muy profundos y hay que enseñarles a transmitir los sentimientos sabiendo que están en un ambiente de confianza, de respeto, protección”, declaró el subsecretario de salud del gobierno federal durante la rueda de prensa para dar el informe actualizado de los casos de coronavirus en México.
Durante esta ocasión, la hora destinada para las autoridades de salud federales expusieran el avance de la pandemia en México, se destinó para que decenas de pequeñines que viven en varios estados de la república mexicana expusieran sus dudas a Hugo López Gatell, con motivo del Día del Niño.
#ConferenciaCoronavirus. La gran pregunta de la epidemia: que enseñanzas nos deja el coronavirus? Cómo va a cambiar el mundo? #PREGUNTALEALDRGATELL pic.twitter.com/UnAJ1IpfTx
— Jenaro Villamil (@jenarovillamil) May 1, 2020
Tras la pregunta de un niño de 10 años que vive en Valle de Bravo, sobre qué enseñanza nos puede dejar la pandemia del coronavirus en México “como país y como niños”, el especialista respondió:
“Cuando se es niño, se aprenden las mejores prácticas: prácticas de cuidado a uno mismo, desde la higiene básica, comer adecuadamente… lavarnos las manos, y además, ayudar a otros. La capacidad de ayudar a otros se puede poner a prueba en una epidemia como esta, y eso para los niños y niñas debe dejar una huella imborrable, que les haga ser unas generaciones más solidarias, más amables, más incluyentes, más respetuosas, no solamente de las personas, también del planeta y el medio ambiente”.
Al inicio de la sesión de preguntas y respuestas, López Gatell comentó que en total se recibieron más de 3 mil 500 videos con preguntas, dibujos, comentarios y demás participaciones de los pequeñines, pero que se tuvo que seleccionar a una reducida cantidad de participantes:
“Si el jabón mata las bacterias, ¿por qué no se hace una vacuna con jabón?”, “¿el coronavirus se va a resolver en cuánto tiempo?”, “¿por qué se te mete el virus a tus células?”, “¿cuándo podré volver a mis terápias?”, entre otras, eran las inocentes e interesantes preguntas que hicieron los pequeños al Dr. Gatell.