STAFF/Marina Alejandra Martínez
Los integrantes de la fracción parlamentaria del partido obradorista en la 76 Legislatura fueron acorralados por la prensa al ser cuestionados sobre su reforma a la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), que trastoca las pensiones futuras de los trabajadores y el por qué no se empieza desde desde la austeridad legislativa.
La crítica principal fue que imponen medidas que afectan las pensiones de los trabajadores a futuro, pero no recortan sus propios salarios y pensiones, los cuales han sido calificados de excesivos e incluso inmorales.
Al ser interrogados insistentemente sobre la posibilidad de reducir sus dietas salariales, los diputados evitaron responder con claridad.
En cambio, desviaron la conversación hacia la importancia de la universidad y la necesidad de salvarla.
El diputado Juan Pablo Celis Silva argumentó que la reforma busca evitar el colapso financiero de la institución, pero evadió cualquier respuesta sobre su propia pensión y la disposición de los legisladores a disminuir sus ingresos.
«Velar por la universidad, larga vida a la universidad, es para eso la reforma, traicionar a la universidad Michoacana sería no hacer nada en este momento, porque colapsaría todo», se limitó a contestar mientras era constantemente cuestionado sobre los salarios de los diputados.
Entre titubeos y evasivas, los legisladores aseguraron que nunca se contempló cambiar el nombre de la universidad y que los derechos laborales no serán vulnerados.
No obstante, su renuencia a abordar el tema de sus propios sueldos dejó en evidencia su falta de congruencia con el discurso de austeridad que defienden.
