STAFF/ Marina Alejandra Martínez
En un acto solemne que reflejó la evidente desidia de los legisladores michoacanos, este martes se inscribió con letras doradas el nombre de Benedicto López Tejeda en el Muro de Honor del parlamento estatal.
Sin embargo, la trascendencia del evento quedó opacada por la escasa asistencia de los diputados, de los cuales solo 17 acudieron al llamado, y cinco de ellos, lo hicieron fuera de tiempo.
El homenaje, que supuestamente rinde justicia histórica al valeroso mariscal del ejército independentista bajo las órdenes de José María Morelos y Pavón e Ignacio López Rayón, y amigo cercano de Miguel Hidalgo y Costilla, se llevó a cabo sin grandes alardes.
«La inscripción de su nombre en letras doradas sobre el Muro de Honor del palacio legislativo, es un acto de justicia histórica el Congreso del Estado, en representación y por mandato del pueblo de Michoacán, visibiliza reconoce y honra la figura la obra y legado del prócer del oriente, oriundo de Tuxpan», manifestó la diputada María de la Luz Núñez Ramos, ante la escasa presencia de sus homólogos y correligionarios.
Los demás poderes del Estado, como reflejo de la misma apatía, se limitaron a enviar a sus representantes en lugar de acudir personalmente.
La develación de las letras doradas sobre el Muro de Honor del Palacio Legislativo, fue una ceremonia carente del esplendor que podría haberse esperado para un reconocimiento de tal envergadura.
A pesar de la retórica oficial que ensalzó la valentía y contribuciones de Benedicto López Tejeda a la lucha por la independencia, la realidad del evento, mostró la falta de interés de los legisladores, quienes, en vísperas de dejar sus funciones, se encuentran totalmente despreocupados, ya que, sus salarios se encuentran asegurados y no acudieron al llamado para honrar la memoria histórica de Michoacán.
