El fraude del buen fin…
Por Fernando Juárez «El Sargento»
Lo que supuestamente surgió como un plan para activar la economía mexicana, por iniciativa gubernamental, es lo que actualmente nos tiene sumidos en la pobreza, marginación y sin un quinto en la bolsa. Como siempre, todo es consecuencia de que en México todo copiamos, desde leyes, logotipos, tradiciones e iniciativas, como casi siempre nos lo robamos de países que no hablan español se requieren traductores que al parecer tomaron 3 meses de clases o el curso de inglés de Mickey, porque siempre copiamos mal las ideas.
El buen fin es la copia de lo que los gringos conocen como Black Friday o Viernes Negro, un evento anual que representa la cúspide del consumismo a lo pendejo, del poder idiotizante de la televisión y sus comerciales y la clara muestra de que venimos del simio. La gente se arrebata cosas, se mientan la madre por unos calcetines y artículos que no necesitan, todo facilitado por los abonos y las mensualidades sin intereses.
En nuestro país las cosas son peores y les diré por qué:
En nuestra república maicera las grandes tiendas departamentales hacen ofertas que son “irresistibles”, te vas con la finta de que supuestamente estas pagando menos y en ocasiones hasta te dicen que a la larga saldrás ahorrando, la gente se la cree, compra, a fin de cuentas que empiezas a pagar hasta enero y además son 18 meses.
Si se han dado cuenta desde que se implementó el buen fin la gente vive al día, los pobres aumentaron, los trabajos se volvieron peor pagados y proliferaron como cucarachas los call centers de cobro de tarjetas, disminuyeron los requisitos para que te den una tarjeta (me parece que solo piden que sepas escribir tu nombre con pluma) y la gente se queja de que solo vive al día.
Somos los únicos culpables por comprar una pantalla de 70 pulgadas para reemplazar la de 65 que apenas terminamos de pagar, pues no es lo mismo y la imagen no se compara y además las varices de Chabelo se ven re bonitas en HD.
Somos culpables de comprar un Blue Ray para poder ver mis clones que compro domingo a domingo en el mercado, porque mi piratero me dijo que ya dejara de vender DVD y por supuesto que requiero un equipo de sonido de 35 bocinas que haga juego, para poder ver mis partidos y mis finales de telenovela los sábados en la noche.
Mi duda es, ¿podemos culpar como siempre al gobierno? ¿Hasta cuándo dejaremos esa actitud de niño chiquito y entenderemos que la mayoría de nuestros problemas sociales, económicos, políticos y culturales son por nuestra huevonada y miedo de no querer hacer nada al respecto?
Si queremos dejar de ser un país pobre, debemos dejar de gastar como ricos, no seguirle el juego a los comerciantes, si un solo año no gastáramos a lo pendejo les aseguro que se acaba el Buen Fin.
Los dejo y que compren mucho, ahí los veo en Marzo en la fila del Monte empeñando.