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Luego de la decisión de Estados Unidos de suspender las importaciones de aguacate y mango proveniente de Michoacán, tras la agresión a dos inspectores del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), los productores enfrentan severas pérdidas económicas.
Con base en información del medio Imagen Noticias, mismo que entrevistó al Director General del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas, Juan Carlos Anaya, se supo que las pérdidas por la suspensión de EU, ascienden a 7.5 millones de dólares diariamente.
México es el principal productor de aguacate a nivel mundial, tan solo en el 2023 se tuvo una producción 2 millones 900 mil toneladas, mientras que Michoacán aporta el 75% a esta cifra.
“El oro verde es muy importante en la balanza comercial, el valor de las exportaciones son de más de 3 mil 200 millones de dólares en 2023 y 2 mil 800 son a Estados Unidos, el 82% de lo que exportamos va a ese mercado” aseveró Juan Carlos Anaya.
A su vez, señaló que el aguacate que llega a los Estados Unidos tiene una magnífica calidad y es muy apreciado por el consumidor americano, en tanto que países como Perú y Colombia buscan competir y en estos momentos nos podrían estar ganando el mercado, aunque todavía no llegan a ese volumen.
“Es lamentable que en una visita que estaban realizando por las carreteras de Michoacán los inspectores que están verificando que se cumplan los protocolos sanitarios en Aranza, que es municipio de Paracho fueran detenidos por productores que estaban tomando las carreteras”. Señaló el director del Grupo Consultor de Mercados.
Juan Carlos lamentó la nula información por parte de las autoridades federales y dijo no comprender la decisión del embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar de reunirse con el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla y no con el presidente de la república Andrés Manuel López Obrador.
Cabe mencionar que en febrero de 2022 ya se había presentado una situación similar en la que inspectores fueron agredidos en Apatzingán, donde detectaron que el aguacate correspondía a una cosecha de Puebla y lo querían hacer pasar como si fuese de Michoacán.
Hasta el momento no se tiene la certeza de cuando se reanudará la exportación, lo cual ha generado la preocupación a los productores, cortadores y exportadores, pero también a los consumidores del oro verde en los Estados Unidos.