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“Comencemos por reconocer que en nuestro estado, los políticos y la política les queda a deber a nuestros representados”, arrancó en su discurso el diputado Salvador Arvizú en representación de la bancada del PT al hablar en el IV Informe de labores de Silvano Aureoles.
Al tomar la palabra en la tribuna parlamentaria del Congreso de Michoacán, el legislador consideró necesario hacer una autoreflexión en sentido de autocrítica “que nos impulse a mejorar respecto a tarea de gobernar”.
Y a pesar de que el congresista petista le reconoció al mandatario michoacano avances logrados en combate a la pobreza “avalados por instituciones serias como el Coneval”, Arvizú puntualizó: “Persiste una deuda con los michoacanos en temas como educación, empleo, salud, seguridad, que son los ejes principales en los que gira una sociedad democrática”.
Aseveró también que “la ciudadanía percibe corrupción. Usted mismo ha declarado señor gobernador, en acto de confesión, sus funcionarios de la estructura de gobierno no trabajan y están alejados de la ciudadanía. En su campaña se ofertó a la sociedad una administración fuera de las oficinas, y alejado de escritorios, cercana a la gente. Esto lo dijo, yo estuve en su campaña, yo fui parte como candidato a regidor, esa palabra empeñada a cuatro años no se ha cumplido a cabalidad”.
Tras pedirle a Aureoles Conejo propicie y fomente la sensibilidad entre los miembros de su gabinete, acotó “Yo le digo hoy ¿por qué habiendo tantos señalamientos a exgobernadores que hicieron un boquete a la economía del estado, por qué se quedan sólo en señalamientos y no se hacen investigaciones a fondo?”, remató.
