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Hasta 1 hora para recibir sus medicamentos es lo que tienen que esperar derechohabientes en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de Camelinas, así lo compartieron para este medio de comunicación abuelitos que acudieron a cambiar sus recetas médicas.
«Sí están las filas grandes, ¡están larguísimas!, tardé 1 hora, traje unos 4 medicamentos, dijeron que no llegan los que despachan la medicina, deben tener más personal o que estén puntuales», expresó el señor Vicente Hernández para este medio de comunicación.
Por otro lado, la señora Lourdes nos platicó que estuvo esperando de 25 a 45 minutos, pese a que iba con su hija y se dividieron para hacer fila en Rayos X y Farmacia para agilizar los tiempos.
«Ay, ¡tardan mucho!, me tocó hacer una fila muy grande para poder surtir, esperamos como 45 minutos por 6 medicamentos, deberían agilizarlo porque habemos personas que no podemos estar mucho paradas», señaló.
Pero no todo fueron opiniones negativas, pues hubo quien dijo haber sido atendida de manera rápida y amable, al igual que las otras ocasiones en las que ha acudido a esta sucursal del IMSS.
«Muy rápido, tarde más en ponerle los datos a la receta que en lo que me hicieron favor de atenderme, siempre hay fila especial, siempre nos atienden bien nomas que a veces uno es el que pone el desorden», resaltó en entrevista la señora María de la Luz.
Es de mencionar que el equipo de Changoonga.com ingresó para checar esta situación y pudimos observar una larga fila como nos lo compartieron algunos derechohabientes, con alrededor de 30 personas esperando.
Pero también es de resaltar que en todo momento personal del lugar se acercaba a la fila para brindar información a las personas sobre cómo llenar el formulario de su receta y ofrecerles a algunas personas de la tercera edad pasar a una fila más corta especial para ellos.
Recordemos que en días pasados la Comisión Estatal de los Derechos Humanos en Michoacán (CEDH) inició una queja en contra del IMSS, por violación al Derecho a la protección de la salud, lo cual consiste en la omisión de proporcionar atención médica y surtido de medicamentos a personas que pertenecen a grupos de atención prioritaria como lo son los adultos mayores.
