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No fue en Michoacán, ni en Zacatecas ni en ninguna otra parte de México: El narco y sus amenazas han trastocado a la familia del futbolista más importante del mundo en la actualidad, luego de que la madrugada de este jueves un supermercado perteneciente a la familia de Antonela Roccuzzo, la esposa de Lionel Messi, fue baleado en la ciudad argentina de Rosario.
En el lugar los criminales dejaron un narcomensaje para el futbolista del París Saint Germain; “Messi te estamos esperando, (el intendente de Rosario, Pablo) Javkin también es narco, no te va a cuidar”.
Cabe señalar que Rosario es la ciudad natal de Messi y donde el astro del fútbol celebra habitualmente las fiestas navideñas y posee una casa dentro de un barrio privado con su familia, sin embargo también es considerada la ciudad más castigada por la violencia en aquella nación sudamericana, golpeada por la acción de bandas de narcotraficantes.
Tras los hechos que han causado revuelo mundial, el Gobierno argentino de plano aceptó que los narcotraficantes que generan violencia en Rosario, “han ganado”, según declaraciones de Aníbal Fernández, ministro de Seguridad,
El ministro Fernández expuso que dicha situación tiene la complicación de 20 años de degradación, situaciones incómodas, un jefe de policía detenido, complicaciones que (las autoridades) heredaron.
“Si hace 20 años que están en esta situación”, explicó, los narcotraficantes “han ganado”, pero comentó que el gobierno de Alberto Fernández está dispuesto a revertir la situación con 3 mil 500 efectivos en el lugar y con la intención de “comprimir la toma de decisiones”, señaló el funcionario.
Por lo pronto las persianas del supermercado de la familia de la esposa de Messi, Antonela Rocuzzo, muestran los impactos de 14 disparos. Messi no se ha pronunciado al respecto.
