STAFF/@michangoonga/Alejandro Amado
Cuatro puntos de encuentro de la comunidad Lésbico, Gay, Bisexual, Transgénero, Travesti, Transexual e Intersexual (LGBTTTI) fueron cerrados durante la administración que encabezó el independiente Alfonso Martínez Alcázar, así lo externó Raúl Martínez, integrante del Colectivo Michoacán es Diversidad.
El activista atribuye directamente al actuar discriminatorio con el que operó la Dirección de Inspección y Vigilancia en la administración municipal pasada, principalmente cuando estuvo a cargo de Mari Cruz Ontiveros Aguilar, que fue cuando se cerraron la mayoría de estos establecimientos con permisos de “Internet para Adultos”, equiparables a los permisos con los que operan los giros rojos ubicados en el Libramiento de la capital michoacana.
“Fueron cuatro negocios de cabinas de Internet, todos con permiso de la autoridad municipal como Internet para Adultos, obviamente más costoso que un Internet tradicional. Los catalogaban como giros rojos, pero como no eran para heterosexuales no estaban en el catálogo de Inspección y vigilancia”, precisó el activista de la diversidad sexual.
Raúl Martínez subrayó que ninguna de las acusaciones que desde la Dirección de Inspección y Vigilancia surgieron en el sentido de trata de personas y abuso de menores pudo comprobarse, por lo que se trataron de acciones movidas por la homofobia de una exfuncionaria las que cerraron estos cuatro espacios que, aclaró, no funcionan al marco de la ley sencillamente porque no hay legislación que los regule.
Añadió que por acusaciones de grupos moralistas se revisaron dos bares, uno en Aquiles Serdán y otro en Virrey de Mendoza sin que encontraran nada aparte de que son lugares frecuentados por la comunidad LGBTTTTI.
“Insistir en que hay que criminalizar la sexualidad nos lleva a la clandestinidad, y en lo clandestino no podemos hacer nada para prevenir salud sexual ni violencia”, concluyó.
