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Una madre de Tlacolula en Oaxaca, ha sido sentenciada a 40 años de prisión por asesinar a su propio hijo, al cual inyectó thinner, gasolina y raticida para después estrangularlo.
De acuerdo a medios locales, la madre identificada como Daniela «N» de 26 años de edad, originaria de San Pedro Quiatoni, Tlacolula, en el estado de Oaxaca, inyectó thinner, gasolina y raticida a su hijo de cinco años, tras inyectarle estas sustancias, lo estranguló y abandonó el pequeño cuerpo en una brecha de esa entidad.
Las autoridades interrogaron a Daniela debido a que vecinos denunciaron que no habían visto al niño desde hace días, por lo que la madre fue incapaz de justificar la ausencia de su hijo y terminó por confesar su crimen.
La madre añadió que previo a que estrangulara a su hijo por el odio que le tenía, le inyectó thinner en uno de sus glúteos, pero como éste no dejaba de revolcarse del dolor, optó por picarlo en la espalda y brazos; además, intentó con la siguiente mezcla, combinó gasolina y veneno para ratas, sin embargo tampoco funcionó, por lo que optó por estrangularlo.
Ese odio que Daniela le tenía a su hijo, fue que el menor quería más a su abuelita, por lo que para desquitarse, ella golpeaba a su pequeño hijo Daniel; acciones que en ésta ocasión lo llevaron a la tumba.
Luego de estrangularlo, Daniela puso el cuerpo de su hijo en una bolsa negra para poder transportarlo en su vehículo y abandonarlo en un lugar alejado para ocultar el crimen.
La zona en que Daniela decidió «ocultar» su crimen fue en el Punto Extepeji y la Cumbre, Ixtlán de Juárez.
Daniela ha sido condenada a 40 años de prisión y una multa de 78 mil 210 pesos por reparación del daño.
Con info de La Opinión.