Monarcas, la papa caliente // By @edi_changoonga
Se pierde más que un equipo de primera división con la posible caída del Monarcas Morelia a Primera A. El posible fracaso del equipo debe ser visto con ojo crítico y un tanto ajeno a las pasiones ideológicas.
No solo es un distractor menos, sino una empresa menos que, en torno suyo, mueve una economía de la que dependen miles de familias; desde transporte público hasta grandes compañías televisoras; desde vendedores ambulantes hasta grandes empresas publicitarias. Y parece curioso pero un equipo de futbol puede hacer todo esto gracias a una generosa y leal participación de los aficionados que domingo tras domingo comparte triunfos y derrotas, aunque las derrotas últimamente sean más numerosas que las victorias y con ello, el equipo se vaya al fracaso llevándose entre las patas a toda esa estructura económica.
Y si bien Monarcas Morelia solo ha conocido pocos triunfos, como el campeonato ante el Toluca en el año 2000, la taquilla siempre ha sido copiosa, aunque de manera inexplicable también se han involucrado en controversias por recibir dinero público en cantidades millonarias que no reflejan beneficios directos para los michoacanos en materia deportiva. Algo debe replantearse con el dinero público destinado a este equipo, pero también un replanteamiento interno que les permita tomar conciencia de las consecuencias que implica su posible fracaso.
La afición es noble y cree en una institución con la que se identifica, con la que llora la derrota y se enorgullece en la victoria. Pero también la directiva del equipo, dueños y TV Azteca, poco han hecho para estrechar ese vínculo que le permita a la afición saberse considerados y estimulados a seguir participando y llenando estadios.
PAPA CALIENTE
Hoy, Monarcas se encuentra al borde del precipicio, literalmente como una papa caliente que nadie quiere agarrar. Si bien la directiva del Morelia fue directa y a la yugular expulsando a Marini luego de la última derrota ante el América, no contaban de inmediato con otro liderazgo de renombre que aceptara el nuevo y delicado reto de dirigir al equipo en los siguientes partidos que serían cruciales. Quizá pensaron que contratar a un nuevo director técnico sería sencillo pero su sorpresa fue mayúscula cuando hubo algunos que ni el teléfono les quisieron contestar. Y es que no cualquier director técnico se quiere aventar el reto de dirigir al equipo pues, otra derrota significaría literalmente la muerte de su carrera.
Por todo esto, el próximo domingo no solo hay que estar atentos con el Morelia; recordemos que no solo está en juego la permanencia de un equipo en primera división.