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El que fuera secretario de Administración y Finanzas en la administración de Salvador Jara como gobernador 
sustituto de Michoacán, Miguel López Miranda, salió en defensa de su antiguo jefe aseverando que durante su mandato no se ocultó ni se desvió nada en materia financiera.
Abordado en el evento de Análisis de la Reforma Fiscal 2017, celebrada en el Centro de Información Arte y Cultura de la Universidad Michoacana, el exfuncionario aseveró que por el contrario, la Contraloría de Michoacán ha venido actuando equivocadamente al no seguir ciertos protocolos.
Respecto del anuncio de dicha dependencia sobre que 2 exgobernadores son de los indiciados, López Miranda, actual coordinador de Planeación de la Subsecretaria de Educación Pública negó que hayan sido denuncias penales las que presentó la contralora, sino más bien actas de vista al ministerio público y dirigidas a ex funcionarios y no a ex gobernadores.
Expuso que desde que Salvador Jara llegó al poder en Michoacán, se terminó la mezcla de recursos conocida como; “licuadora” y agregó que desde su óptica personal, el asunto tiene más tintes mediáticos.
Señaló además que desde el cierre de la administración del ex gobernador Tinoco Rubí, hasta la salida de Fausto Vallejo, el estado no cuenta con recursos financieros suficientes para cumplir con sus obligaciones, situación dijo, que se repetirá, desafortunadamente año con año.
Agregó que él no ha sido requerido ante la procuraduría o los tribunales, no obstante de manera tajante señaló que en el periodo en el que estuvo al frente de la Secretaría de Finanzas no hubo desvío de recursos, o desfalcos como se ha querido que aparezcan, sino más bien, contrario, tuvieron que tomarse decisiones de carácter administrativo y a las que se les dio cauce jurídico.
