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Agentes de las policías Estatal de Seguridad Pública e Investigadora (PESP y PEI) dispararon contra un grupo de manifestantes que tomaron esta mañana las instalaciones del Servicio de Administración Tributaria (SAT), conocidas como la Puerta de México.
A apenas 50 metros de la garita internacional Deniss DeConcini, se recogieron casquillos percutidos de arma larga R15, escopeta, y revólver, así como de escuadras calibre .40 milímetros (mm) y .9 mm.
La manifestación comenzó a eso de las 8 am al bloquear un grupo de inconformes el de los automóviles con dirección al país, cuando alrededor de 60 agentes preventivos e investigadores con vestidura táctica antimotín se colocó en formación frente a ellos.
Todo cambió cuando al mediodía, según la versión de los manifestantes y la autoridad estatal, unos menores de edad ajenos al movimiento -infiltrados- empezaron a arrojar piedras contra los oficiales, que de inmediato se replegaron.
Mientras los uniformados montaron una barrera humana, los desconocidos seguían lanzando piedras. Sin embargo poco después los agentes comenzaron a lanzar disparos gases lacrimógenos, balas y granadas de goma contra los manifestantes. Lo que provocó más resistencia.
La situación se volvió más tensa a las 4 de la tarde, cuando los manifestantes empezaron a lanzar piedras a los agentes una lluvia de piedras contra los agentes, y entonces se escucharon las primeras detonaciones de armas de fuego desde autos oficiales de la policía estatal.
En los videos compartidos en redes sociales se observa a la unidad estatal con placas WCR 5046 en el momento que acciona su arma de cargo contra civiles que se encontraban escondidos detrás de unos árboles.
El conflicto duró más de una hora, sin embargo después de lograr conciliación, los manifestantes volvieron a tomar las vías del tren que habían sido liberadas por la madrugada del domingo.
Ante la situación la versión oficial es que dos policías resultaron lesionados, a raíz de las agresiones por parte de los jóvenes. Según la autoridad estatal, las corporaciones que participaron tenían el propósito de que se permitiera el libre tránsito de vehículos por la garita y el acceso por las vías del tren para que no se afectará la economía estatal.
“La instrucción siempre fue la de no hacer daño a los ciudadanos, por eso no se lanzaron gases lacrimógenos al haber en el lugar mujeres y niños”, cita el informe de prensa.
