STAFF/Marco Antonio Duarte Aguilar
El gobernador Silvano Aureoles Conejo aseguró que la lucha contra el narcotráfico será «tope donde tope», tras el derribo de un helicóptero en el municipio de La Huacana, donde murieron un piloto y tres policías ministeriales que perseguían a Ignacio Andrade Rentería «El Cenizo», narcotraficante que busca el control de Michoacán.
En un mensaje que ofreció en la residencia oficial Casa de Gobierno, el mandatario estatal aseguró que autoridades de los tres niveles de gobierno han recuperado bastiones históricos del narcotráfico en la región de Tierra Caliente, por lo que las fuerzas de seguridad no darán ningún paso atrás.
«El gobierno del estado ratifica su determinación de cero tolerancia en contra de quienes actúen en perjuicio de la sociedad michoacana, tope donde tope. Tengan la certeza de que vamos a liberar a Michoacán del flagelo de la impunidad y la delincuencia», advirtió.
Flanqueado por el general Pedro Felipe Gurrola Ramírez, comandante de la XII Región Militar y Mando Único de Seguridad en Michoacán, Aureoles Conejo lamentó la muerte de los servidores públicos y afirmó que la aeronave seguía la pista de líderes delincuenciales que vieron frustrada su intención de secuestrar a un agricultor en la comunidad de Cupuán del Río.
«Las acciones operativas en materia de seguridad fueron intensificadas tras ser frustrado el intento de privar de su libertad a un agricultor de la comunidad de Cupuán del Río, municipio de La Huacana; en este hecho fueron ubicados líderes de células delincuenciales por lo que fueron desplegados elementos por tierra y aire para lograr su captura», precisó.