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Un espacio no muy grande con alrededor de 8 cuartos muy pequeños con su limitado baño, eran las áreas de castigo que se encontraban en el centro de reinserción social «Gral. Francisco J. Múgica» que fueron construidas desde el año de 1958 y donde de acuerdo a la información del actual Director General, Félix López Rosales durante los últimos años fueron usadas muy poco, ya que la conducta de los presos era buen y muy pocas veces por pequeños enfrentamientos tuvieron que llevarlos a esa zona.
Durante la visita de medios de comunicación nos dimos cuenta que este lugar además de ser muy frío por su estructura, tiene escasas dos ventanas que entran luz, así como la separación de cuartos y en cada uno 2 literas es decir 4 camas más que lindo individuales, así como el olor característico de humedad y drenaje que son muy fuertes, y las bardas se pueden ver afectadas desde rayones hasta imágenes de la muerte, así como dibujos y letras que los que estuvieron ahí ponían.
A pesar que la información del Director fue que no se tenían a muchas personas en el interior de esta zona desde hace tiempo, al ingresar se pudieron ver pertenencias desde cobijas, libros, revistas, refrescos, agua, y algunas otras cosas más, incluso hasta un plato de frijoles con tortillas duras que a simple vista se veía que tenían pocos días ahí.
