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El ombudsman michoacano, Víctor Serrato Lozano, manifestó analizar la muerte del niño Miguel Ángel de Opopeo, que hace algunas semanas se dió a conocer, que fue golpeado por sus compañeras y un menor al interior de la Escuela Primaria Felipe Tzintzun.
La Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) fue concreto y declaró: “En su caso analizaremos si por omisión las autoridades educativas propiciaron que el resultado fuera este lamentable fallecimiento”. También añadió que el caso no está cerrado.
Reiteró que coincide con la necropsia hecha por la Procuraduría de Michoacán, pero resaltó que el Organismo protector de los derechos humanos en la entidad ha detectado junto con la procuraduría, que sí hubo una broncoaspiración, así como violencia escolar y agresión física.
Con relación a esto Becerril Almazán dijo a la prensa: “Estaban jugando a ‘tú las traes’, andaban corriendo, esforzándose, se produce el primer desmayo del menor, ES ASISTIDO POR UN MAESTRO DE LA ESCUELA, es traslado con un doctor y después llevado al hospital. Traía un poquito de dolor de pecho y seguramente congestionamiento de las vías respiratorias”.
Aquí la duda cabe en si el educador tenía o no conocimiento en técnicas de primeros auxilios y si en realidad se siguieron los protocolos de actuación para en caso de emergencias, los cuales la escuela debería poseer, toda vez que son impartidos por el Consejo Preventivo de la Violencia Escolar del Estado de Michoacán (Copreveem), señalaron fuentes al interior de la CEDH.
Cabe recordar la declaración de Guadalupe, Alfredo Becerril ante los medios de comunicación: “Son menores de 12 años, -el fallecido- tenía una edad dentro de este rango, hay que decirlo con toda claridad: Tienen una condición de inimputables, cualquier menor de 12 años son formalmente inimputables ante la ley”. ¿Deberían entrarle al tema de lleno las autoridades educativas? Toda vez que el ombudsman michoacano afirmó que sí hubo violencia escolar y en todo caso los profesores son los responsables de lo que ocurra en el plantel de aprendizaje, principalmente el director. ¿Debería ser destituido el director? ¿Las autoridades michoacanas deberían de poner mayor énfasis en los programas de erradicación de la violencia escolar?
Explicaron los contactos de la CEDH: El niño estuvo de 34 a 40 minutos sufriendo de un fuerte dolor, decía que se quemaba (aunque Guadalupe Alfredo Becerril lo calificó como “un poquito de dolor de pecho”): “Andaba desesperado por el dolor, quería que le echáramos agua, decía que se quemaba. Estaba bien desesperado. Ya estaba echando saliva y el doctor -particular- dijo: Sáquenlo de aquí. Duramos como 35 minutos ahí y no reaccionó el niño”, narró en su momento su abuela Arcelia. Víctor Serrato expresó recientemente sobre el galeno: “Estamos también viendo la actuación que tuvo el médico particular, parece que le faltó pericia”.
