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Un alocado conductor, quien dijo ser policía estatal, embistió con su camioneta las mesas del establecimiento «La Calle Real», donde se metió prácticamente hasta la cocina, atropelló y dejó gravemente herido a un taxista del sitio «Máquinas Rojas» que en esos momentos cenaba, además lesionó levemente a dos empleados y una cajera del citado negocio, ubicado en el Periférico República, a la altura de la colonia Ignacio Zaragoza, de esta capital.
La información anterior fue obtenida en el lugar del incidente, el cual ocurrió alrededor de las 02:17 horas de este martes. Bomberos locales y unos paramédicos acudieron al mencionado comercio, donde le brindaron los primeros auxilios al trabajador del volante identificado como Juan Carlos «P», de 35 años de edad, quien tuvo severos daños en su humanidad y fue canalizado de emergencia al Hospital Civil.
Los rescatistas también atendieron a los tres empleados del negocio, dos de ellos con quemaduras en la espalda, pues les cayó aceite caliente, pero no requirieron traslado médico. En la escena se supo que el causante del percance es Gabriel «R», de 28 años de edad, el cual aparentemente estaba alcoholizado y argumentó ser oficial estatal.
Varios testigos de los hechos relataron que minutos antes de la tragedia, Gabriel abordó su furgoneta Ford Expedition, color blanco, placa PHU8108, la cual arrancó a toda velocidad y derribó el portón del Motel París, localizado en la colonia Volcanes, lugar donde se hospedaba. Como «alma que lleva el diablo», el individuo circuló sobre la lateral del
Libramiento en el sentido hacia la avenida Morelos Norte, pero en determinado momento pasó junto a una camioneta de carga y le destruyó un espejo retrovisor.
Continuó su camino e impactó la parte trasera izquierda de un vehículo de alquiler, consecutivamente pierdió el control, trepó a la banqueta, estrelló un anuncio luminoso y se proyectó contra las instalaciones del referido local de alimentos, donde generó destrozos y desafortunadamente terminó malherido el taxista Juan, quien en esos instantes cenaba.
Al provocar todo el desastre, Gabriel descendió del automotor siniestrado y corrió, no obstante fue alcanzado por unas personas, mismas que lo detuvieron para luego entregarlo a unos oficiales.
El arrestado también tuvo una fractura en el antebrazo izquierdo a raíz del percance, pero no quiso ser enviado a un hospital, por tal motivo los guardianes del orden lo llevaron a barandilla y lo entregaron a la autoridad competente, misma que se encargó de investigar el caso.
