¿El D.F. dejó de ser gay friendly?
Por Dr. Gerardo A. Herrera Pérez.
¿El D.F. dejo de ser gay friendly? ¿O se volvió intolerante la autoridad local, y busca el control absoluto para mantener el poder?
Durante los últimos sesenta años, la comunidad homosexual o llamada LGBTTTI, construyó los andamiajes para su visibilidad plena y con ello, desde luego, avanza en la eliminación de aquellos mecanismos de opresión que instrumenta el Sistema de Género en contra de los transgresores de género, uno de ellos es justamente la invisibilidad, el estigma, el prejuicio y el estereotipo.
De esta manera nos dice Héctor Salinas que la historia de la organización política de los actores de la disidencia sexual cubren cuando menos cuatro décadas que van de 1971 a 2014; también precisa que antes de 1970, no existen antecedentes claros de organizaciones de disidentes sexuales, por lo que el precedente de estas organizaciones de disidentes sexuales se remontan a ciertas fiestas realizadas a finales del siglos XIX y principios del siglo XX (19001) y que magistralmente documenta Carlos Monsiváis (qepd) en diversos textos (Que se abra esa puerta), o bien Hernández Chávez, Lizarraja, entre otros.
La historia moderna del movimiento de disidencia sexual, nos señala que en los años setenta fue de organización social, toda vez que en 1971 se funda el Frente de Liberación Homosexual, organización pionera en México; pese a ello, solo tuvo vida por un año, pero da paso a la formación de organismos como Sex-Pol y Acratas (1974), y en 1977, se funda Lesbos, posteriormente en 1978 se instala Oikabeth y Clóset de Sor Juana, así como el Frente Homosexual de Acción Revolucionaria (FHAR), que desaparece en 1982 y posteriormente se funda en junio de ese año el grupo Lambda.
Los primeros en visibilizar un movimiento de disidencia sexual fue el FHAR, y en 1978, con el aniversario de la Revolución Cubana, participan en la marcha conmemorativa FHAR, Lambda y Oikabeth, no obstantes este trabajo organizativo y de impacto social ve su debacle en 1981-1982 y concluye con la aparición del cáncer rosa, el VIH SIDA en 1984.
Los años ochenta, y el fantasma del SIDA que llego a México en 1983 con el primer caso tomo por sorpresa a una población no preparada para hacer frente a este flagelo de salud pública. La sociedad también se organiza para hacer frente a estas realidad de salud y se crean los organismos como Cálamo, o la Fundación Mexicana para la Lucha contra el Sida, que nace en 1987.
En los años noventa, y dada la incidencia política que se generó en los años ochenta en la gobernanza entre organizaciones sociales y gubernamentales se dio una nueva etapa para la interlocución; se abordaron nuevos temas para la agenda pública de la diversidad sexual, principalmente los de carácter civil y desde luego se crean otras organizaciones como Taller Reflexivo de Mujeres Bisexuales en 1996, y para 1998, se instala Caracol, red mixta bisexual, Crisálida en 1993, y en 1995, se abre el Centro Cultural de la Diversidad Sexual, entre otros, como los Días de los Transgéneros apoyado por el Grupo EON, que comandaba el sexólogo José Luis Álvarez Gayou.
En esta etapa del 2000 al 2014, se han ido consolidando muchas organizaciones y sus proyectos, tanto en el Distrito Federal, como en el interior de la República, como es el caso de Michoacán, Nuevo León, Tabasco, San Luis Potosi, Chihuahua, Quintana Roo, Oaxaca, que existen los liderazgos y las agendas públicas y políticas. En este periodo también surgen organizaciones sociales como Humana Nación Trans, Opción Bi, Lesbianas de México, Lesbianas de Zacatecas, etc.
La Marcha del Orgullo gay en la Ciudad de México (MOG)
El antecedente inmediato a la MOG, se dio en 1978; sale un pequeño contingente del FHAR, dentro de la Gran Marcha contra la Represión y por la Amnistía de los presos políticos de 1968 y de 1971.
La MOG, es la manifestación política más importante del movimiento de disidencia sexual y desde luego la más visible y se lleva a cabo desde 1979, siendo ésta, la más longeva de América Latina y el Caribe; no obstante muchas de estas marchas hoy se llevan en diferentes entidades de la República como el caso de Jalisco y Nuevo León.
La primera MOG realizada en 1979, cubrió un recorrido del monumento a la Revolución hasta la Alameda Central, y para 1981, se estableció el itinerario que hasta la fecha se mantiene: desde la Puerta de los Leones en el parque de Chapultepec hasta el Zócalo. Desde entonces se realiza el último sábado de junio, salvo en fechas electorales se mueve para no coincidir con pronunciamientos partidistas o manifestaciones de partidos políticos.
Hoy, en esta edición número XXXVI, la MOG, podría dejar de utilizar el recorrido “Puerta de los Leones en el parque de Chapultepec hasta el Zócalo”, me explico:
El Comité organizador de la XXXVI Marcha Histórica del Orgullo LGBTTTI de la Ciudad de México informo mediante un comunicado público que, el Gobierno del Distrito Federal se ha hecho bajo coacción de la organización de la Marcha del Orgullo LGBTTTI de la Ciudad de México, y lo ha hecho valiéndose de la colaboración de la señora Patria Jiménez, (exdiputada federal y senadora del PRD).
Precisa el documento que, Juan José García Ochoa, subsecretario de Gobierno del Distrito Federal, citó el martes próximo 24 de junio a las 12 hrs, para ver el trayecto del Zócalo por el que ahora se propone por el Gobierno del Distrito Federal, partir del Angel de la Independencia, y llegar, al Monumento a la Revolución; no obstante se precisa, que las delegaciones (políticas) han distribuido posters indicando que el arribo de la MOG será el Monumento a la Revolución. Además de circular en varios puntos de la ciudad un poster con logos de distintas dependencias de GDF acreditándose la intervención directa de COPRED.
El comunicado expresa que “Quisiéramos pensar que la actitud del GDF no tiene nada que ver con el lema y mensaje que como Comité de la Marcha Histórica habíamos lanzado a nuestras poblaciones como motivo de la XXXVI Marcha del Orgullo: En el DF, “¿Derechos? ¡Faltan!”. Es cierto, el GDF actual ha hecho bandera de nuestra causa. Pero más allá de banderas y de palabras huecas, no podemos ser complacientes con quien con sus hechos nos demuestra que, o bien ha usado nuestra agenda política para buscar una legitimidad cada vez más contestada, o bien busca el enfrentamiento con la sociedad civil para justificar cambios en la correlación de fuerzas entre los grupos políticos dela ciudad de cara a próximas legislaturas”.
Adicionalmente, precisa el comunicado, “Cuando en diciembre cumplimentamos en tiempo y forma los requisitos legales para la celebración de la marcha, dejamos bien claro que nuestra intención era terminar la manifestación en el Zócalo. No ha sido hasta el presente mes de junio que la autoridad nos ha hecho saber que no permitirá que lleguemos al Zócalo porque el propio Gobierno ha ocupado la plancha para la transmisión de los partidos de la Copa Mundial de Fútbol.
“Llegar hasta el Zócalo no es hoy un objetivo …..es un derecho. Y lo es porque el Zócalo es ahora un espacio tan nuestro como lo es del resto de la población que nunca más puede estar cerrado a la libre expresión de lesbianas,gays y personas bisexuales o trans”. “Queremos llegar pacífica y alegremente al Zócalo, como siempre lo hemos hecho, para hacer valer nuestro derecho al uso de TODA la ciudad”.
Finalmente en el comunicado se lee, que “quienes integramos el Comité organizador de la XXXVI Marcha Histórica del Orgullo LGBTTTI hemos decidido romper relaciones con el GDF y desconocemos a Patria Jiménez Flores y a su Comité, deslindándonos de la organización de la manifestación”. Razón por la cual “responsabilizamos a Patria Jiménez y a su Comité de las situaciones que puedan derivarse de la decisión del GDF de usar la fuerza pública contra quienes quieran hacer valer su derecho de vivir TODA la ciudad en libertad y de apoyar a su selección nacional desde el reconocimiento de su propia preferencia sexual o identidad de género”
Qué está en juego, en esta XXXVI MOG (comentarios vertidos en razón del posicionamiento del comité organizador de la MOG):
Primero: perder el acercamiento político y de debate de las ideas de varios años, entre el movimiento disidente sexual con las autoridades de la Cd. de México, con quienes se han ido tejiendo acuerdos políticos, que han posicionado a la Ciudad de México como gay freindly, incluyente y plural; la intolerancia, la falta de negociación política, así como las decisiones no consensuada de la autoridad capitalina con el movimiento disidente sexual, vulneran la autonomía del comité organizador de la MOG, al desplazarlo en la toma de decisiones, perdiendo con ello el control sobre las estrategias y los acuerdos para el desarrollo de la marcha.
Segundo: frente al discurso de la autoridad del GDF de cambio en el formato tradicional de la MOG, y bajo las resistencia del comité organizador a llevarlo a cabo y de plantear protestas, se podrían generar acciones de represión de los órganos policiacos contra el movimiento disidente sexual; tendríamos nuevamente las llamadas razzias y las consecuencias mediáticas contra un movimiento sensiblemente observado en América Latina y el Caribe, con los impactos turísticos que esto le generaría a la Ciudad de México y los acuerdos que tiene que cumplir México en materia de Derechos Humanos.
Tercero: el movimiento de disidencia sexual y su expresión política de la MOG que es la más visible debido al grado de reconocimiento social que ha alcanzado a causa de su antigüedad así como el desarrollo de sus organizaciones, debe ser entendida a la luz de que es una expresión que esta sustentada por la participación de poblaciones disidentes sexuales de todas las entidades federativas de México; por lo que debe verse más como un movimiento de carácter nacional, organizado por disidentes sexuales de la Ciudad de México, que debe mantener sus usos y costumbres de 35 años de vida efectiva.
Cuarto: La violación de los derechos humanos de las y los disidentes sexuales en el marco de los derechos a la libertad de expresión (Art. 6 constitucional), a la libertad de asociación y de reunión (Art. 9 constitucional), a la igualdad y no discriminación (Art. 1 constitucional, párrafo quinto), pese a la existencia de un discurso enmarcado en la filosofía de los derechos humanos.
Quinto: Recordemos que la comunidad disidente sexual en una “fuerza política”, que sufraga y que puede definir el rumbo en una elección popular, como lo hizo cuando no le obsequio el voto al otrora candidato Andrés Manuel López Obredor, de ahí la importancia de negociar con las autoridades los posicionamientos para que se lleve a cabo la MOG como históricamente se ha realizado.
Sexto: No llegar a dialogar el movimiento disidente sexual y autoridades para encontrar salidas al conflicto, podría generar el dejar de visibilizar las agendas públicas gay, lésbica, transexual, intersexual, cuyos impactos no se traducirían en el fortalecimiento a marcos normativos o políticas públicas o bien a nuevas normas o acciones públicas.
Séptimo: Al parecer, y tal como lo expresan en el documento el comité organizador de la MOG, la autoridad aprovecho que el comité organizador de la MOG se encuentra en una dinámica de desgaste, de conflicto entre los liderazgos y de un elevado número de organización, que junto con la falta de negociación de sus integrantes para generar un mínimo de acuerdos entre ellos y ellas; hoy, la autoridad le está apostando a este escenario para hacerse de la organización de la MOG?.
Cuál será el formato que se utilizará este próximo fin de semana, ya en el desarrollo de la XXXVI Marcha del Orgullo Gay, en la Ciudad de México?, veremos una marcha con protestas, o una marcha con protestas y propuestas?….
También la comunidad diversa sexual, requiere saber cuál es la posición real de la autoridad, la MOG está a unos días de llevarse a cabo; para tener las dos visiones, se requiere de un pronunciamiento por parte de las autoridades centrales, en donde se presenten sus consideraciones.
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