“No puedo vivir sin ti”, conmueve carta de enamorada a su esposo fallecido de hace 500 años
STAFF / @michangoonga
En el año 2000 arqueólogos de la Universidad Nacional de Andong encontraron una carta de amor que data de 1586 y que hasta la fecha sigue conmoviendo al mundo por la delicadeza y el dolor que la enamorada le escribe a su esposo fallecido.
De acuerdo a datos oficiales, el cuerpo de la momia corresponde a Eung-tae quien vivió en el siglo XVI en la ciudad de Andong en Corea del Sur. Al encontrar la tumba y retirar las piezas de ropa hasta llegar al cuerpo con el cráneo muy dañado, pero la piel y la barba aún visibles, estaba rodeado por 13 cartas, pero fue una la que llamó más la atención, así como unas zapatillas hechas con cabello de su amada.
Se trata de su enamorada, quien al fallecer su esposo se encontraba embarazada y tras la pérdida del amor de su vida, le escribió la apasionada carta la cual estaba colocada en el pecho de la momia y comienza con “Léela atentamente y vuelve a mí en sueños y muéstrate en detalle”.
Asimismo en la carta se lee “Por favor, llévame a donde estés. Mi corazón, mis sentimientos hacia ti son lo último que podré olvidar en este mundo”, tras poco más de 400 años de antigüedad, la carta e historia han inspirado a que se escriban novelas y óperas alrededor del mundo.
Aquí la carta integra:
Al padre de Won
1 de junio de 1586
Siempre dijiste: «Amor, vivamos juntos hasta que nuestro pelo encanezca y podamos morir el mismo día. ¿Cómo has podido morirte sin mí? ¿A quién vamos a escuchar mi pequeño y yo, cómo debemos vivir? ¿Cómo pudiste alejarte de mí?
Recuerdas cómo tu corazón moraba en mí y cómo yo habitaba en el tuyo? Cada vez que nos acostábamos juntos siempre te decía: «Amor, ¿habrá alguien que se quiera como nosotros? ¿Realmente como nosotros?» ¿Cómo pudiste dejarme así, después de todo?
Es que no puedo vivir sin ti. Es que quiero irme contigo. Por favor, llévame a donde estés. Mi corazón, mis sentimientos hacia ti son lo último que podré olvidar en este mundo. En mi corazón desgarrado solo queda un dolor sin límites. Solo puedo preguntarme: ¿cómo puedo vivir con el niño si nos faltas, pensando en ti, sin fuerzas para sosegarme?
Por favor, respóndeme a todas estas preguntas, lee esta carta y contéstame con todo detalle en mis sueños, en cuanto puedas. Esa es la razón por la que te escrito esta carta y la entierro contigo. Ojalá pueda escuchar tu voz suavemente en mis sueños. Mirala atentamente y habla conmigo. Un día me dijiste que querías decirle algo al niño cuando viniera al mundo, pero te has ido tan repentinamente. Cuando dé a luz al niño, ¿a quién llamará padre?
¿Cómo puedes entender cómo me siento? No existe una tragedia como este dolor mío bajo el cielo. Te has ido a otro lugar, pero no padeces una tristeza tan profunda como la que me dejas. No puedo contar cómo me siento realmente, no puedo expresar mi dolor sin fin salvo con estas palabras ásperas y precipitadas.
Por favor, como te digo, lee atentamente esta carta y ven a mis sueños y muéstrate y hablemos de todas estas cosas. Estoy tan segura de que podré verte en mis sueños. Ven a mí en secreto y muéstrate, ¿Lo harás?. Hay tantas cosas que debo decirte, tanto que queda fuera de esta carta. Adiós.
Te quiere,
Tu esposa
Con información de ABC.es
