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En un caso que está dando la vuelta a las redes nacionales del país, sucedió en Guadalajara, cuando el inspector municipal Carlos Fabila García le quitó a Juan Antonio Hernández Jiménez, un niño chiapaneco, sus artesanías que estaba ofreciendo en el Centro de la perla tapatía luego de que el trabajador municipal afirmara que del alcalde proviene la orden de retirar a los indígenas “porque dan mal aspecto”.
El abuso del inspector fue denunciado por ciudadanos que presenciaron cómo decomisó mercancía a un indígena menor de edad que vendía artesanías en el centro de la ciudad.
El inspector Fabila García aseguró mercancía que se vendía en la calle pero sin entregar un folio para recuperarla, hecho que fue reportado por personas que pasaban afuera de los juzgados mercantiles, lugar de los hechos, y se percataron del acto.
Víctor Ramírez Nava, uno de los testigos narró: “Los mismos inspectores que andan vestidos de civiles le dicen al comercio informal, a los que traen carritos, que se salgan mientras pasa la inspección y luego los dejan que se vuelvan a meter a vender. Tengo fotos en las que están recibiendo dinero bajito del agua y, siempre se encajan con el indígena y no se vale”, señaló en entrevista con el medio Página 24.
Y agregó: “El inspector Carlos Fabila dijo que todo lo que hacían, lo hacían por mandato del presidente (Ramiro Hernández García), que él los estaba mandando principalmente a quitar a los indígenas, porque daban muy mal aspecto a las plazas y que por eso se les ubicaba en plazas fuera del centro”.
Y una religiosa que pasó por el lugar, Adelina García López, indicó: “Vi que había policías y que al niño lo tenían agarrado de la mano, nosotros nos quedamos observando, no sabíamos qué pasaba, él (el niño) estaba defendiendo su bolsa y un señor ya grande lo tenía agarrado, fue mucho tiempo, como 20 minutos. Yo vi que fue una agresión contra el niño porque temblaba, estaba llorando, el hombre le quitaba la mercancía y no lo soltaba, le dijimos que eso no estaba bien. Es una gran injusticia”, señaló.
“Los que tienen más preparación deben de apoyar, eso que hicieron yo lo considero como un abuso de autoridad”, prosiguió.
–¿Hubo agresiones?
–Lo tenía agarrado del brazo, muy fuerte, el niño estaba llorando y las personas que estaban ahí no lo defendieron, al contrario, dijeron que tenía que quitárselo porque la orden era así, que lo teníamos que hacer y punto.
*con info de fahoonoticias.org