STAFF / @michangoonga
FOTOS: EDUARDO CASTAÑEDA
¡Oh madre todo tú dolor a los ojos de tus hijos! Miles de católicos acompañaron en silencio a la Virgen de la Soledad.
Morelia se vistió de luto y fervor durante la Procesión del Silencio, donde al sonido del tambor marcó el paso de las 19 cofradías que participaron.
A las 19:30 horas de la calzada de Guadalupe, los penitentes que en su mayoría cubren sus rostros con capuchas iniciaron la procesión donde las penumbras aportan esa atmósfera fúnebre.
Una veintena de hombres vestidos de negro cargan al Santo Entierro, el cual representa el cuerpo inerte de Cristo.
Metros atrás la figura de la Virgen de la Soledad, que llora a su hijo, es escoltada por las sevillanas, vestimenta que delata el origen español de la Procesión del Silencio.
Mediante saetas se alienta a la devoción de los creyentes que se arremolinan en las calles, pero sobre todo a las afueras de la Catedral de Morelia donde se hace sonar la matraca como símbolo de agradecimiento al señor.
Tras el pésame elevado por el Obispo Auxiliar, Juan Espinoza, las imágenes pesadísimas son puestas nuevamente en movimiento.
Una vez más los dolientes, los nazarenos, y los que portaban indumentaria purépecha continuaron su camino doblando por la Plaza de Armas hasta la Plaza Valladolid donde los puestos ambulantes faltando a la solemnidad del momento no apagaron sus luces, no guardaron silencio.
Así a las 21:00 horas la Procesión del Silencio arribó al Templo de las Capuchinas, lugar donde comenzó esta tradición en 1976, misma que hoy alcanzó cifras históricas según lo reportó la Secretaría de Turismo, ya que participaron cerca de 2 mil personas y asistieron alrededor de 25 mil.