Mamá gato adopta erizos de tierra

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Sonya, una gata jengibre de Rusia, sólo tenía un gatito y leche de sobra, por lo que tuvo a bien adoptar a cuatro erizos. Ella los trata como si fueran sus hijos, de modo que los erizos se acurrucan en su pelo cuando terminan de comer.

Es una práctica común que a los bebés animales abandonados se les coloque con una madre sustituta de la misma especia para evitar el re-abandono más tarde, el problema es cuando no hay un madre de la misma especie disponible, explica Daily Mail.

Hay casos en que gatos adoptan conejos, mapaches, ardillas e incluso perros, como sucedió con el caso de Smaigel de Jordania, quien adoptó cachorros como sus propios hijos, pero ésta es la primera vez que oímos hablar de un erizo que es adoptado por una gata.

Puesto que la leche de los mamíferos es muy similar, es una opción mejor que la alimentación con biberón.

Con información de dailymail.co.uk