Asesino de Oslo logra cómoda para que no se le arruguen sus polos de Lacoste

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Una vez más el sistema penitenciario de Noruega vuelve dar de que hablar y es que a concedido a Anders Breivik, el autor confeso del atentado de Oslo y la matanza de la isla de Utoya una cómoda para que acomode sus polos de Lacoste, pues no le gusta tenerlos por ahí tirados.

Quién asesinó a 77 personas afirmó que los polos de Lacoste que estaban perdiendo su forma, porque no tenía dónde guardarlos en su celda. También se le concedió un reproductor de CD una pluma nueva, pues decía que la anterior, que era de caucho, le hacía heridas en los dedos.

Anders Breivik ganó estas comodidades después de escribir (con la pluma de caucho) una carta de 27 páginas de denuncia a las autoridades penitenciarias sobre su vida en prisión, al comenzar su sentencia de 21 años.

En ella, Anders se quejó de todo, desde el café frío a diario hasta la mala iluminación de la prisión. Por quejarse, Breivik también afirma que las esposas que él usa cuando se mueve alrededor de la prisión son muy afiladas y le hacen ronchón en las muñecas. Y también que no le dan el tiempo suficiente para afeitarse por las mañanas.

Lacoste ya intentó el año pasado ponerse en contacto discretamente con la policía noruega para intentar evitar que la persona responsable de la masacre luciese sus polos. Breivik asegura que un polo Lacoste lo caracteriza como “un europeo bien educado de tendencia conservadora”.

Con información de The Daily Mirror.