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“Soy inocente” se declaró ante juzgado el ex subsecretario de la Defensa Nacional, Tomás Ángeles Dauahare, luego de que el juez federal le tomó la declaración preparatoria en el penal de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México, a quien pidió la duplicidad del término constitucional para ofrecer pruebas a su favor.
En el mismo sentido se declararon los otros generales acusados de vínculos con el crímen organizado: Ricardo Escorcia Vargas y Roberto Dawe González, además del teniente coronel Silvio Isidro de Jesús Hernández, durante la diligencia que duró más de siete horas ante el juez Tercero de Distrito de Procesos Penales Federales con residencia en Toluca, Raúl Valerio Ramírez.
Esto fue revelado por autoridades federales y personas cercanas a la defensa de los militares, quienes señalaron que todos negaron haber protegido o dado información al cártel de los hermanos Beltrán Leyva, como aseguró la Procuraduría General de la República.
En tanto entrevistada por Radio Fórmula, la esposa del general Ángeles aseveró que su marido es víctima del Estado, y “víctima de la impunidad, es víctima del derecho que todos los mexicanos estamos expuestos, somos rehenes del poder del estado, todo esto está fuera del Estado de Derecho, según enfatizó de manera enérgica, Leticia Zepeda.
En el noticiero de Pepe Cárdenas la señora Zepeda, agregó que las autoridades mienten al decir que hay una pugna por la sucesión, «mi marido se dedicaba por completo a la familia, en el momento que estuvo en el activo y estuvo en la terna para participar y no quedó, él lo asumió».
