La Michoacana y sus eternas crisis
Por Paul Alcántar
La Universidad de los michoacanos sigue rehén desde que tengo memoria. Las historia del alumnado sufriendo por los paros de quienes se asumen como “luchadores estudiantiles” o por parte del sindicato nicolaíta ha sido de años, si no es que de décadas.
El reconocimiento de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo como una de las universidades que le ha dado renombre a la historia nacional se ha esfumado. Fue la primera universidad en América instaurada para crear y reproducir conocimiento con las mejores intenciones. Fue donde se leía a Rousseau y Los principios de derecho político para inspirar a Miguel Hidalgo, en esa misma casona de la actual preparatoria número 1 de Morelia, y conspirar contra la corona española, por la lucha de otro concepto de nación.
La historia cuestiona la situación de nuestra Universidad cuando la mayoría de sus estudiantes están hartos de tanta mediocridad de unos cuantos. Los nicolaítas de hace rato, han visto cómo su Alma Mater sigue en un desprestigio y decadencia porque no se reconoce lo mucho que ha aportado al estado con sus conocimientos, anécdotas y leyendas que han construido sus alumnos, académicos y trabajadores de tan honorable institución.
¿Cuál será el rumbo de la UMSNH? ¿Será acaso un asunto meramente interno el gran problema de rezago académico que ha mantenido la institución desde hace, por lo menos, dos décadas?
La Michoacana (como de cariño nombramos a la Universidad) debe reformarse y merece autoridades ilustres, competentes y respetables para que este proceso de autonomía y de desarrollo perdure. La UNAM es un caso ejemplar de cómo una institución puede pasar del infierno a la gloria. No sólo la CUL y el SUEUM tienen la responsabilidad de respetar a los universitarios, el Rector y el Gobernador deben tomar al toro por los cuernos.
O por lo menos que demuestren esa voluntad de hacerlo.
Chapulines
- Los alumnos ya están haciendo lo propio, quienes desean continuar sus estudios exigieron pacíficamente, con un ejemplo cívico envidiable, regresar a clases; que los porros dejen las instalaciones y que los dejen continuar con sus actividades académicas. Se manifestaron por el centro de Morelia ¡por la banqueta! sin tomar ninguna avenida. Aplausos.
- Jesús Reyna, secretario de gobierno de esta administración priísta, dice que el tiempo le dará la razón al haber negociado la liberación de los porros que hicieron desmanes en Morelia. La impunidad no es negociable, señor.
Twitter: @paulalcantar
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