SOFTNEWS

Sobre el origen y erotismo de la piñata…

Por Fernando Juárez “El Sargento”

Hombre sabio sin estudios, interesado en la lectura y en lo paranormal, conductor de un Podcast de corte esotérico, sus principales objetivos son lograr entender un poco más con cada día que pasa, ver coronarse campeón al Atlante y llegar a tener una colección de libros que si bien no compita con una biblioteca pueda ocupar un cuarto de 3 por 3, eso sí, todos leídos y comentados. Espacio dedicado a la sugerencia de lecturas de diversos temas, a la especulación de temas paranormales, reflexivos y misteriosos, sitio donde se abordaran cuestiones que bien pueden creerse vánales o irreales pero que todos en algún momento han escuchado, leído o vivido
Hombre sabio sin estudios, interesado en la lectura y en lo paranormal, conductor de un Podcast de corte esotérico, sus principales objetivos son lograr entender un poco más con cada día que pasa, ver coronarse campeón al Atlante y llegar a tener una colección de libros que si bien no compita con una biblioteca pueda ocupar un cuarto de 3 por 3, eso sí, todos leídos y comentados. Espacio dedicado a la sugerencia de lecturas de diversos temas, a la especulación de temas paranormales, reflexivos y misteriosos, sitio donde se abordaran cuestiones que bien pueden creerse vánales o irreales pero que todos en algún momento han escuchado, leído o vivido.

Existen personas que en estas fechas se encuentran completamente comprometidos con desempeñar un papel respetable en el maratón Guadalupe-Reyes, otros que se están refugiando en la publicación de Status en contra del futbol y la mercadotecnia de la Navidad y otros que están buscando como gastarse todo el aguinaldo porque el mundo se acabara en Marzo, todos tienen su forma de afrontar estas fechas que de acuerdo con la ciencia médica son depresivas.

(Antes de continuar con la lectura favor de buscar en YouTube y escuchar simultáneamente “Unchained Melody” para entrar en ambiente)

Pero sin embargo hay clase de personas en nuestro país, como el autor de esta columna, que estas fechas la toman como una oportunidad para sentirse aunque sea por un instante cerca de Demi Moore, recordemos esa mítica escena de la película Ghost donde se entregan a la pasión con las manos llenas de arcilla, hagan de cuenta lo mismo pero con engrudo y periódico y en la mesa de la cocina y solo.

piñateros

Una tradición que cada vez se pierde más en nuestro bonito país,  hacer las piñatas en la casa, ya nadie se acuerda como hacer engrudo y mucho menos saben cómo hacer ese fino calculo algebraico para calcular el grosor ideal de las capas de periódico que permita el balance entre los golpes y resistencia sin reducir el entretenimiento.

En un principio la piñata fue una herramienta de los frailes para inculcar las bases de la religión, se cuenta que los 7 picos representan a los siete pecados capitales (aquí es cuando viene a su mente el que más han realizado), la piñata debe ser colorida para decirnos que las tentaciones de la vida son muy llamativas, nos dejamos tapar los ojos para representar la fe ciega en Dios, nos dan vuelta nos cantan y nos dicen mal dónde está la piñata para representar a las personas y distracciones que nos intentaran desviar del camino del bien.

Pegarle a la piñata representa la lucha que tenemos que afrontar todos los días en contra del pecado y cuando por fin después de pegarle a la pared o a algún sobrino que se aventó antes de tiempo logramos romper la piñata, esa caída de dulces rotos y mandarinas magulladas representa las recompensas que nos dará la vida o Dios si vencemos al pecado.

Como podrán haberse dado cuenta todas esas tradiciones son más complejas de lo que nos acordamos, si pueden apréndanse más o menos lo que les acabo de escribir y díganselo a alguien más chico para que no muera la tradición o aunque sea úsenlo de tema para ligar en alguna posada, como todos saben no hay nada más sexy  y que demuestra más seguridad que alguien que se te acerca y te dice: “¿Sabes que representa la piñata?

Changoonga.com no necesariamente adopta como suyos los choros, chorizos, morongas  y chistorras publicados en ella y deja en sus respectivos padres (autores) la responsabilidad de todas las barrabasadas y debrayes que aquí plasman, producto de las ardillas hiperactivas que habitan en sus macetas. Si te gusta, ¡dale like y comparte!

 

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba