El derecho a la educación y la escuela digna// By @Ruy_Carreno
Por Ruy Carreño
A decir del artículo 3° de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, las y los mexicanos tienen derecho a una educación laica y gratuita. Atendiendo al texto constitucional, todos los mexicanos debemos tener acceso a ella, en los niveles preescolar, primaria, secundaria y media superior. El Estado (Federación, entidades federativas, Distrito Federal y Municipios), debe garantizar que todas las personas, contemos con una educación de calidad; normativamente, el Estado está obligado a garantizar que las instituciones creadas para impartir la educación básica, cuenten con los recursos materiales (aulas, bancas, etc.) y humanos (personal docente idóneo) a fin de concretar ese derecho.
Sin embargo, aún en nuestros días, el derecho antes mencionado, no podría estar más alejado de la realidad; basta con echar un vistazo a las comunidades más alejadas de los estados de la república, para darse cuenta de la lamentable situación de carencia, en la que operan los centros educativos; lo que nos lleva a afirmar que las autoridades en la materia, no están garantizando un derecho constitucional de orden universal.
Particularizando el hecho, al noroeste de la ciudad de Morelia, Michoacán; en la colonia popular José Vasconcelos (la cual colinda con las localidades de la Aldea y Atapaneo), se la encuentra la “Escuela Primaria Lázaro Cárdenas” con clave de la SEP 16DPR5382C, la cual actualmente con una matrícula de 110 alumnos, mismos que conforman los 6 grados de nivel primaria, dicho centro escolar cuenta con una planta docente de cinco profesores, comisionados frente a grupo. Estos 110 alumnos reciben clases en aulas (si así se le puede llamar) al aire libre, hechas de costera de madera y techos de lamina de cartón, sin muros de concreto; con un baño para niñas y uno más para niños, con una malla perimetral que delimita el área escolar, como única protección.
Atento a ésta problemática, cualquiera podría cuestionar: ¿En dónde queda el mandato constitucional y la obligación del Estado de garantizar éste derecho?; ¿dónde está el gobierno que permite que 110 niños reciban clases en condiciones inhumanas? Es cierto, que el derecho a la educación debe ser garantizado por el Estado, sin embargo, como ciudadanos no podemos permanecer pasivos ante este problema y esperar a que el gobierno actúe respecto al futuro educativo de estos niños; por ello, es menester tomar las acciones necesarias y unir fuerzas, a fin de contribuir con una causa social que es de todos. La exigencia de la ciudadanía debe estar acompañada de acciones positivas, encaminadas a la realización de una educación de calidad (término por demás amplio).
Ante la ausencia de un gobierno capaz de garantizar éste tipo de derechos, se hace indispensable tomar la iniciativa y construir lazos de fraternidad y apoyo mutuo; a fin de transformar nuestro presente y construir un futuro mejor; por ello, es momento de aportar a ésta causa, encabezada por “Cualicantus”, una organización de la sociedad civil, integrada por ciudadanos con sentido social, la cual ha unido esfuerzos, a fin de emprender el proyecto “Construyamos un aula para la Escuela Lázaro Cárdenas”.
Este grupo ha realizado diversas actividades, encaminadas a la recaudación de recursos económicos, desde boteos en el centro de la ciudad y las principales plazas, rifas y kermeses, una de ellas a realizarse el próximo 27 de septiembre del presente año en el bosque Cuauhtémoc, con dichas actividades se ha recibido apoyo; más este no ha sido suficiente, debido a que se han enfrentado con la indiferencia e incluso la desconfianza de buena parte de la sociedad moreliana, lo cual dificulta la empresa, es por ello que se apela a la buena fe y el apoyo de la ciudadanía en general, para que los auxilien a llevar acabo dicho proyecto; haciendo donaciones en especie o aportaciones económicas.
Ante tales circunstancias, debemos demostrar sin enfado nuestra preocupación por el futuro educativo de las niñas y niños de la Escuela Lázaro Cárdenas, en unión con la causa.
Si usted está en posibilidades de contribuir, comuníquese al teléfono 4432297905 con Alberto Hernández; con la seguridad de que 110 niños se lo agradecerán.
Unidos podemos, hacer la diferencia.
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